Debemos combinar el trabajo de laboratorio con una mentalidad lúdica y viceversa. (Alvar Aalto)
A raíz de la construcción del ayuntamiento de Säynätsalo, Alvar Aalto conoce la isla de Muuratsalo en el lago de Päijänne. Se acaba de casar con el Elissa Mäkiniemi y juntos deciden comprar lo que será el emplazamiento de su nueva casa de vacaciones. La obra de esta casa se convertirá en un laboratorio de ensayo de materiales y experimentación constructiva.
Cuando habla sobre la Casa Experimental, Alvar Aalto nos habla del juego y de los ensayos que hay que hacer en cada proyecto, en cada encargo, por el bien de la técnica y de la arquitectura. Os proponemos una mirada a la casa a través de los elementos que él mismo analiza, siguiendo el hilo de las propias palabras del autor.
EL JUEGO
A pesar de romper una lanza por la experimentación y por la parte lúdica implícita en el ejercicio de la profesión, lo hace desde el respecto al cliente y al rol de técnico que le corresponde al arquitecto:
Sólo cuando los componentes constructivos de un edificio, las formas que se deducen lógicamente y el saber empírico se colorean con el que podríamos denominar el arte del juego, estamos en el camino correcto. La técnica y la economía tienen que estar siempre en conexión con el encanto enriquecedor de la vida.
[…] nuestra casa experimental […] se construye por divertimento del propio arquitecto, para sus juegos. Pero también para realizar experimentos serios, principalmente para solucionar problemas que no se pueden explorar en los encargos normales.
Los edificios de nuestros clientes incluyen siempre un cierto porcentaje de pruebas experimentales, de otro modo la curva de desarrollo de la técnica y de la arquitectura se resentiría: quizás ni siquiera vería la luz. El experimento en los encargos corrientes no tiene que sobrepasar un porcentaje limitado, y dentro siempre de un cálculo de racionamiento juicioso. En nuestra propia ‘casa de juegos’ hemos querido probar algo cuyo porcentaje de racionalidad no pueda todavía comprobarse.
EL PATIO
[…] Así, las paredes del patio central están divididas en aproximadamente cincuenta campos diferentes, donde se ha probado la eficacia de varios materiales cerámicos -ladrillo, en medidas y acabados de superficie diferentes, rejuntados, etc.- La experimentación de formas se combina siempre con pruebas de durabilidad, algo con lo que los arquitectos están acostumbrados a tratar día trás día. Lo mismo podemos decir del revestimiento del patio central, donde año tras año, se probarán los diversos tratamientos técnicos, desde el de las superficies esmaltadas o pétreas hasta los efectos estéticos o la resistencia de plantas decorativas y musgos.
EL FUEGO
[…]una fogata situada en el centro domina todo el grupo de edificios. En cuanto a su utilidad y carácter acogedor, se asemeja a una hoguera de campamento en la cual el fuego y su reflejo sobre la nieve transmiten al hombre una sensación agradable de calor, casi mística.
LOS REFERENTES
La arquitectura de Aalto es una síntesis, sobre la base del Movimento Moderno imperante, de la arquitectura vernácula finlandesa y los referentes procedentes de otras culturas.
En palabras ahora de Antonio Armesto (uno de los mejores profesores que tuvimos durante nuestra etapa de formación en la ETSAB), nos interesa la lectura que hace de los referentes clásicos en el proyecto. Tanto en cuanto al paralelismo entre las estrategias de aproximación al templo griego y a la llegada a la casa desde el lago de Päijänne, en un recorrido ascendente y en escorzo:
[…] el modo en que se accede a la casa ascendiendo desde el lago se asemeja al itinerario de las vías sacras de los santuarios y acrópolis griegas.
Como por las analogías que establece con los ámbitos domésticos:
Sin decirlo, Aalto toma como referencia a la casa griega antigua, aquella que se define como un recinto que delimita la propiedad familiar y protege el fuego sagrado cuyo significado se refiere a la continuidad, a la persistencia de la estirpe en el lugar, a través de los dioses *ares. […] En este tipo de casa, las habitaciones se disponían apoyadas en uno de los lados del patio e iban añadiéndose, formando una L, a veces ocupando tres lados, en U. […] «Nuestros antepasados serán siempre nuestros maestros» había escrito ya en 1922.
Una intensa sensación de interioridad se asocia a este patio. Si antes decíamos que el gran tamaño aparente mediaba entre la naturaleza virgen y la casa como universo humano, el patio invierte esta relación: la naturaleza vista desde él no es banal sino sobrecogedora, de modo que encender aquí el fuego es un acto sacramental, primordial, desde el momento que revela sensiblemente a la conciencia nuestra posición relativa en el mundo: «No habitamos porque hayamos construido, más bien construimos y hemos construido en la medida en que habitamos…» dirá Heidegger por aquellos años.
Encontraréis mucha información sobre la casa, pero os recomendamos las fuentes utilitzadas en la redacción del post:
Las fuentes de las imágenes que aparecen en el post:
Si queréis visitar la casa, encontraréis informació en la web del Alvar Aalto Museo:
