Diseño museográfico de la exposición temporal Imágenes para creer. Católicos y protestantes en Europa y Barcelona, siglos XVI-XVIII en el Salón del Tinell del MUHBA en la Plaça del Rei.
A partir de un juego de mesa, el TANGRAM, que propone formar figuras a partir de unas piezas dadas, se establecen unas reglas para disponer los elementos museogràfics en el espacio del Salón del Tinell.
Mediante la superposición de una trama ortogonal, que contiene la estructura principal y las instalaciones, y una segunda trama girada 45º, sobre la que se disponen los soportes expositivos en planta, se generan las diferentes piezas de este tangram: cuadrados y triángulos de diferentes medidas, que van estructurando el espacio y definiendo los diferentes ámbitos de la exposición.
tangram
sustantivo masculino m juegos de entretenimiento juegos
Rompecabezas de origen chino constituido por un cuadrado dividido en siete formas geométricas con la combinación de las cuales se pueden construir varias figuras.
El recorrido de ida y vuelta resulta dirigido y pautado, como metáfora de la religión que se intentaba imponer a base de un adoctrinamiento que no permitía escapar del camino dibujado. Este laberinto se rompe en algunos puntos, abriéndose a los muros góticos de la nave para dejar entrever la arquitectura que lo acoge.
Las vitrinas se adaptan a la geometría en planta de las diferentes agregaciones de módulos expositivos, bien como elementos lineales que acompañan estos módulos, o bien como piezas en esquina, ocupando el diedro formado por dos paneles.
La disposición de los diferentes elementos sobre esta doble trama permite jerarquizar el espacio, dotando de intensidad los tramos del discurso que lo necesitan, y permiten el descanso del visitante en algunos puntos determinados que funcionan como pulmones, pequeñas plazas de una estructura urbana de callejones que se pliegan sobre sí mismos.
En contraposición a la densidad del contenido a exponer, el diseño de los apoyos expositivos y del mobiliario auxiliar quiere transmitir una imagen de ligereza y de modernidad. Los materiales y los colores intentan dar el contrapunto a la estética severa de los grabados religiosos: paneles de policarbonato montados sobre bastidores de madera, con los recortes necesarios para empotrar las cápsulas de metacrilato que enmarcan los grabados.
El apartado La Biblia grabada se entiende como una exposición dentro de la exposición: un tramo de galería clásica, más densa en obras y homogénea en el discurso, que pone énfasis en las piezas de la colección Gelonch-Viladegut. Esta narración enmarcada sustituye el policarbonato por tejido tensado, a la vez que incorpora el color violeta burdeos.
En este ámbito el recorrido lo acaban de definir los bancos, que se sitúan de manera central en la sucesión de espacios, para que el visitante pueda hacer una pausa contemplativa en el apartado con más densidad de grabados a pared.
La propuesta museogràfica para la exposición Imágenes para creer está formada por elementos modulares, contemplando la posibilidad de que el conjunto pueda ser itinerante.
Las estructuras son desmontables y fácilmente apilables para optimizar el espacio del transporte.
Las cápsulas que enmarcan la obra hacen que esta pueda viajar en las condiciones óptimas.
situación: MUHBA, Barcelona fecha: 2017
promotor: Museu d’Història de Barcelona (MUHBA) colaboradores: Olga Virtanen diseño gráfico: Run design, Pau Martínez Just y Olga Virtanen producción: Croquis fotografía: Julio Ungidos